En este trabajo se trata de recoger la esencia, esas caracteríscas propias de un personaje. La realización se llevó a cabo con la antíquisima técnica del temple. Técnica comunmente utilizada a lo largo de la historia sobre todo en la Edad Medía hasta la aparición de la técnica al óleo aproximadamente en los siglos XIV y XV.
El personaje simplemente posa, y comienza el proceso de realización. Como se puede observar es una pintura dominada por el impactante contraste entre dos colores complementarios que acentúan más si cabe las diferentes expresiones, que es lo que en este caso interesaba. Un retrato visto de una manera distinta.
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